Volviendo a la carga

No escribo hoy desde las orillas de Oriente Próximo, sino desde las más cercanas del Guadalquivir, río que fue mi casa y que tanto eché de menos al tocar, desde la playa de Iskenderun (en la franja turca que roza con Siria) las aguas del Mediterráneo que hermanan mis dos hogares, Turquía y España.

Retomar el blog no estaba entre mis planes más inmediatos. Censuraron el acceso a blogspot desde la red turca y eliminé los posts que tenía sobre los kurdos y sus reclamaciones a raiz de varios "encuentros" con las instancias oficiales, para evitar males mayores. Alguien lo llamó "auto censura". En aquel momento, lo llamé "precaución" y ahora, con la perspectiva del espacio y el tiempo, lo defino "miedo", ese miedo que se aplica con tanto éxito a la población para acallarla y evitar que persiga sus derechos.

Algún día, no muy lejano, haré algo parecido al periodismo que los de Américo Vespucio (la Facultad donde aún estudio) admiramos, y contaré lo que allí pasa con profundidad. Por el momento, seguiré en mi tónica de retratar lo que veo, lo que escucho y lo que siento, para intentar traer al otro extremo de Europa ese retrato de las faldas de Turquía que se me va grabando en la memoria.

Mientras tanto, voy más abajo de la falda, en el suelo, o mejor, en el subsuelo. La cadena AlJazeera.com (que, ojo, no es la famosa AlJazeera qatarí) publicó hoy un vídeo de la CNN que muestra evidencias del uso de Fósforo Blanco como armas contra la población palestina durante la invasión de Israel. La Comunidad Internacional ya ha denunciado esta posibilidad, que el Gobierno de E. Olmert negó en un principio. Ahora, tras las pruebas aportadas por médicos, medios de comunicación y agencias como Amnistía Internacional (que investiga el caso), el gabinete israelí ha admitido haberlo usado pero "no de manera ilegal".

El Fósforo Blanco es un material químico que, incorporado a las bombas, provoca quemaduras inmediatas y devastadoras en objetos (casas enteras que se incendian) y personas ("quema inmediatamente hasta los huesos", dice el reportero de la CNN).

Está considerado "arma legal" pero sólo en terrenos abiertos sin población para producir una pantalla de humo y ocultar el movimiento de las tropas, y es completamente ilegal en zonas de concentración urbana.

Parece evidente, así lo recoge el documento, que el Ejército israelí debió intuir, al bombardear una franja de 360 km cuadrados donde se agolpan 1´5 millones de personas, que acertaría sobre blanco humano. "Nuestros objetivos no son los palestinos, ellos no son nuestros enemigos", dice el portavoz del Gobierno israelí Mark Regev al finalizar el vídeo. ¿Dudamos de que los miembros de los Servicios de Inteligencia israelíes sepan hacer cálculos de probabilidad?...

... O pensamos en que Israel preveía este uso cuando, en 1995, firmó un Convenio Internacional sobre el uso de "Armas Inhumanas", pero no el Protocolo III, que prohibe las armas incendiarias, como el Fósforo Blanco (también mencionado en el video de la CNN).

Desnudos ante la evidencia, el Gobierno israelí ya hace lo que hiciera en 2006, cuando el desastre de la invasión de Líbano condujo a la Comisión Winograd: ahora dice estar investigando los hechos y culpa de ellos a una "brigada paracaidista de reserva".

Aspectos sobre el conflicto Palestino-Isarelí hay tantos como elementos entran en juego. Pero mientras Obama promete "un cambio", las potencias se reunen en Egipto y se nos va la energía en juegos diplomáticos de los que ya se conoce el final... Gaza se quema viva.

(Foto de http://www.mideastweb.org/mgaza.htm)